Las cosas que se cuentan en la peluqueria!



jueves, 4 de agosto de 2011

Aurora

Hola abuela!... cómo estás hoy? - pues aquí triste muchacho... murió mi papá!
hay abuela tu papá murió hace como 50 años!
-pues si niño y lloro su ausencia!.. y por qué me llama abuela? si yo soy una niña y usted es grande!
Aurora ya vas a empezar otra vez de loca! a veces creo que me tomas el pelo!
Anoche tuve un sueño... estaba en un lugar muy oscuro, pero me sentía muy cómoda, comencé a moverme y de pronto una pequeña luz apareció de la nada;  intente tocarla  pero estaba yo amarrada y en el intento me vi envuelta en lienzos de seda que se despegaban con delicadeza y conocí lo que llaman día, la luz entraba por mis ojos que miraban con dificultad y yo me estiraba sintiendo como cada rayo de luz invadía  mi ser...
-Ah que chido  Aurora!... loca!
El aire me movía, me elevaba.... mientras yo solo quería prolongar ese instante en un volar breve y tranquilo, entregada a la entereza de vivir ..... experimenté  lo que es estar libre, miré el mundo desde arriba, sólo existía yo en medio de un mar de viento y suavidad... no aleteaba, flotaba; y después oscuridad absoluta.
Vayase! ya vayase niño! mi papá vendrá por mi y no le gusta que hable con extraños....dijo Aurora
cerró los ojos para dormir como lo hacia siempre después de la merienda,  para seguir soñando supongo... como siempre todos los jueves los días que yo la visitaba, como todos los jueves después de escuchar con paciencia sus historias y desvarios  de anciana loca...como siempre!... pero este sueño no conoceré... de éste sueño Aurora, mi abuela loca no volvió.

martes, 12 de julio de 2011

Experimentar, morir y seguir viviendo

Ahora se lo que es estar muerto; me he partido tanto y me he repartido demás que mi vida ha quedado en otras vidas, involucrada en tantas historias, tantas que ya no recuerdo cuál es la mía, cada final es como si fuera propio y en cada uno de esos finales siento que muero un poco...
Se paró delante de mí con la cara transformada y las venas saltadas por encima del cuello... me apuntó con su pistola y me dijo: ahora si te cargó la chingada !!!. soltó un tiro al aire que quedo marcado en el techo de la sala y después me disparó.
Toqué mi cuerpo para saber si estaba de pie o estaba en el piso, cuando vi  su rostro lleno de miedo miré  con la seguridad de ver mi cuerpo allí tendido: ahora sabia lo que es morir; una extraña mezcla de vacío y nada!
No se cuánto tiempo pasó, busqué y busqué y lo veía y me veía y... todo era tan normal!.
Sólo me di cuenta cuando mis hijos llegaron y tomaron el arma, supe entonces que había querido asustarme; había metido un solo tiro a su pistola, el mismo que soltó al techo... quería asustarme y, lo consiguió: cuando vi que la pistola estaba completamente cargada y el tiro que iba  dirigido amí jamás salió... Morí? un poco!  murió el miedo dejando un vacío que aprendí a llenar con emociones, decidí entonces darle el sentido a mí vida, experimentar y reconocer cada una de mis muertes sólo para continuar viviendo...

lunes, 27 de junio de 2011

Cuando la pena... es mas grande que el dolor.!!!

 Nos avisaron temprano que la misa de cuerpo presente seria alas 5 de la tarde, mi abuela yo llegamos un poco tarde y el cuerpo aun no llegaba.
  Ay mi papá...! ay mi papá... papasito porqué te fuiste?... papasito por me dejaste... Ay diosito porque te lo llevaste???- gritaba Mercedes inconsolable, Roberto su hermano y un amigo la ayudaban a mantenerse de pie; entraron después de la carroza, sobresaliendo entre el cortejo fúnebre.
 Lentamente la carroza entró al cementerio, sólo los gritos de Meche resonaban en el silencioso lugar mientras todos los asistentes curiosos observaban.
Madre  no reconozco a nadie!
yo tampoco!.- dijo mi abuela
La puerta trasera de la carroza se abrió para dejar ante la vista de todos el fino ataúd...  Y Meche completamente privada en sollozos gritos y llanto.
Meche, Meche cálmate...!
Meche tranquilízate...!
Meche contrólate... le decía un hombre  que salio de entre  la multitud.
Meche cálmate...! hasta que por fin tomándola por los hombros y sacudiéndola fuertemente grito: Mercedes que te calmes... este muerto no es tu papá!!!
Los interruptores generadores de tanto dolor  y llanto se apagaron repentinamente, milagrosamente su piernas tuvieron la fuerza necesaria para mantenerse de pie por si misma para luego perderse escurrida entre las tumbas rumbo ala capilla  donde mi abuelo estaba tendido en su modesta caja de muerto... presente en su ultima misa.
Ya en la capilla, el dolor de perder al ser querido... se apodero nuevamente de ella!

sábado, 25 de junio de 2011

hipo-no vale nada la vida

la vida no vale nada:

Pues sí Rosita!
- dijo Chabela con tono despreocupado.
Chabela era nuestra vecina allá  en Morelia, cuando vivíamos ala orilla de la carretera; tenía un rancho y era la única vecina a tres kilómetros a la redonda.
Rosa mi tía le enseñaba todas la tardes a leer y a escribir, mientras conversaban y se distraían.
Oye Chabe, y tu abuelito?
Huuuuuuuy Rosiiiiita!... se puso grave, lo tuvimos que internar de emergencia antes de que ustedes llegaran a vivir aquí, lo  internamos mas de tres veces, ya iba y ya venía; ambulancias para un lado y para otro; medicamentos, sueros y tanques de oxígeno... y ya ves? se murió y nos quedamos con la deuda.
Pues si Chabe, así son las cosas... y tu abuelita? preguntó Rosa para así cambiar la conversación
- Aaaah con ella nos fue mejor!... la atropelló un camión de la corona y hasta el funeral nos pagaron!!!!

viernes, 24 de junio de 2011

Camion de Pasajeros - las jilguerillas

Programaciones.

Mira... allá abajo!!! cuando era niño mi abuela decía que los arbustos y arboles forman la imagen de la virgen. le dije a Luciano-. Habíamos subido a la montaña de Cristo rey, estuvimos casi 15 minutos allí arriba observando el paisaje. Le explique, y después de un rato consiguió ver; era jueves y gracias a dios el atrio estaba desierto.
Cuando era niño venía seguido con mi abuela, ella era una mujer fuerte y maciza: de rancho, y yo un niño de apenas 8 años. Después de entrar al recinto ella me explicaba detenidamente como era la imagen que sólo ella podía ver; me explicaba una y otra vez apuntando siempre hacia el mismo lugar ... y yo? : fingía verla para evitar siempre la misma explicación... hasta que un día finalmente la vi.
-Paco, paco... bueno?... cabezón contesta- decía mi madre al teléfono.
-Si? que pasó?
-Pos dónde andas?
-llegando a León
-ah!... oye estoy en casa de mi mamá quieren venir a cenar?
-si te veo allí al rato.
Llegamos a casa de mi abuela, para amenizar un poco le conté sobre mis vacaciones.
Madre!!!... fuimos a cristo rey para que Luciano vea que tenemos nuestro propio Corcovado.
¿Recuerda que cuando era niño siempre me decía que la virgen se.... ... -no termine la  frase cuando mi abuela interrumpió- pero yo nunca la vi!!!!
Pero cómo que nunca la vio??? si hasta me señalaba y me decía, año tras año la misma historia... hasta yo la he visto y he hecho que Luciano la vea!!!...- pués yo nunca la vi!- dijo nuevamente con cara divertida... a mi, mi abuela me decía que la virgen ...allí estaba...     


Salir con dignidad...

No hubo llantos ni preguntas...:ni mucho menos caras tristes; solo la respiración entrecortada y a veces profunda de quien al dar por terminadas las situaciones termina por aceptar lo inevitable.
Mi madre llegó tranquila, de tanto discutir y de tanto reclamar estábamos todos cansados. Nos alistó sin decir una sola palabra, en pleno miércoles y en menos de 20 minutos todos listos y preparado para salir como si fuera
día domingo. Mis hermanas trenzando sus cabellos sin siquiera mirarse y yo en mi mejor pantalón  de poliéster  incómodo y rígido, pero impecable y brillante, la camisa de cuadros que mi madre  confeccionó para usar sólo en días de fiesta ; todos muy guapos... pero mudos, sabíamos que no regresaríamos.
Don Cruz llegó tarde a casa, empujando puertas a patadas y vociferando contra su mujer que siempre esperaba hasta tarde para servirle la cena... habían pasado tres días antes de que repartiera su salario con los amigos de parranda, ahora con los bolsillos vacíos era hora de volver...

HUGO AVENDAÑO, ADIOS MI CHAPARRITA